LE ENSEÑE A MI PRIMO - Lo tumbe boca arriba y me puse a cuatro patas y le empece a lamer la puntita, lami y lami hasta que la envolvi con los labios y empece el mete y saca en la boquita, estuve chupando hasta que se corrio
LE ENSEÑÉ A MI PRIMO Lo tumbé boca arriba y me puse a cuatro patas y le empecé a lamer la puntita, lamí y lamí hasta que la envolví con los labios y empecé el mete y saca en la boquita, estuve chupando hasta que se corrió
Hola, me llamo Cristina y tengo 23 años. Hace unos meses fui a la playa con mi primo que tiene 18 años, y bueno estando allí empezamos a jugar en el agua a hundirnos y esas tonterías que se hacen en una playa.
Al llegar a mi casa, me di cuenta que ya quedaba poco agua caliente, así que le dije a mi primo que si quería podíamos ducharnos juntos, y un poco cortado me dijo que si. Tengo que aclarar que desde chicos nos duchábamos juntos cuando íbamos de vacaciones y eso, pero lo que está claro es que ya no somos niños, aunque a mi me parecía muy natural.
La cosa fue que vi a mi primo un poco cortado a la hora de quitarse la ropa, y pronto entendí porqué, tenía una erección de caballo, le dije que se tranquilizase, que bueno, era algo que les suele pasar a los hombres.
Ya cuando estábamos duchándonos noté que no dejaba de mirarme, y le pregunté si le gustaba lo que veía, me dijo que si, y le dije que no fuese tímido, que éramos primos y que no me molestaba que me mirase, a lo que mi primo me suelta que nunca había estado con una chica, que no había pasado de algún que otro rollo, cosa que me sorprendió, porque mi primo está de muy buen ver. La conversación fue fluyendo hasta que me propuso algo, me dijo que si le dejaba tocarme, al principio me sorprendió y cerré el grifo de la ducha, pero luego me quedé mirándole y le dije, De acuerdo, pero no vamos a pasar de ahí ¿vale?, lo cierto es que eso me había puesto algo caliente por lo extraño de la situación, pues le dije que me tocase las tetas si quería, empezó a hacerlo algo tímidamente, pero pronto me empezó a sobar con más fuerza, me preguntó que si podía chuparlas y le dije que no preguntase, que directamente hiciese lo que quería, que cuando me sintiese incómoda yo lo detendría. Pues dicho esto, empezó a chuparme las tetas y a abrazarme.
Luego, le cogí su mano y la dirigí a mi cosita, le dije que estuviese así un rato, primero fue un poco brusco, me intentó meter los dedos de primeras, pero le enseñé como hacerlo, le dije que primero me acariciase los labios y subiese hasta el clítoris, y así lo hizo, me producía mucho placer, y empecé a darle pequeños besitos, en los labios, hasta que nuestras lenguas acabaron entrelazadas.
Poco después, me abrazó para acariciarme el culo, yo permanecí abrazada a él, mientras nos seguíamos enrollando, entonces noté que estaba rozando su polla contra mi vientre, así estuvo un rato hasta que se noté que estaba acelerando demasiado, así que me separé de él y le acaricié sus partes y enseguida me soltó un chorro de semen, se quedó cortadísimo, por lo que volví a abrazarle y le dije que eso les pasaba a muchos, que no se preocupase, y ahí quedó todo hasta la siguiente semana. Así que salimos de la ducha él se cambió y volvió a su casa.
A la semana siguiente salimos juntos de marcha como otras veces, lo que en esta ocasión en lugar de primos parecíamos una parejita, no por ir de la mano ni nada, sino por como nos mirábamos y como bailamos esa noche, la verdad es que solemos salir juntos, pero nunca habíamos estado así.
Al volver a casa, cuando salimos él se queda en casa, ya que vive lejos de la ciudad, y ese fin de semana yo estaba sola en casa, y al llegar nos tomamos una copita y seguimos bailando, mi primo me empezó a meter mano y me dijo que quería desquitarse por lo del otro día, yo le dije que si, yo estaba calentísima, pero tuve un momento de cordura y le dije dos cosas.
Primera y muy importante, ¿Tienes condones?, y me dijo que no, a lo que le contesté que no iba a dejar que me penetrase a pelo, él se desilusionó, pero le comenté que podríamos hacer otras cosas, como sexo oral.
Segunda, eso debería quedar en secreto, ya que no quería que mis tíos ni mis pa
dres se enterasen.
Después de dejarlo todo claro, empezamos enrollarnos, mi primo estaba dislocado, pero ahora trataba de ir más calmadito, pero bueno, lo llevé a mi cuarto y lo fui desnudando, hasta que ese aparatito que tiene mi primo quedó a la vista, yo en ese momento me separé de él, le tiré para atrás en la cama y le deleité con un striptease, mis novios hasta ahora me dicen que lo hago muy bien y que los hago sufrir por la espera.
Yo iba vestida con un top una minifalda y unas botas, al terminar le dije a mi primo que me comiese el coño, y allí se apresuró, lo hizo muy bien, se ve que mis explicaciones de cómo tocarlo le habían servido, y vaya, a mi también, disfruté muchísimo, me ponía las manos en las tetas, eso me hace enloquecer, así hasta que me vine, uff, el primer orgasmo que me daba mi primito, le dije que me había hecho correr, y noté su cara de satisfacción, y le dije que ahora recibiría su premio.
Lo tumbé boca arriba y me puse a cuatro patas y le empecé a lamer la puntita, lamí y lamí hasta que la envolví con los labios y empecé el mete y saca en la boquita, mi primo suspiraba y me acariciaba la cabeza y los hombros, estuve chupando hasta que se corrió, que rica corrida me echó, la mantuve en la boca y la escupí, ya que me gusta que se corran en mi boca pero no tragarlo, le di un besazo en toda regla.
Esa noche dormimos juntos, pero a la mañana siguiente me sentí un poco mal, pero peor me sentí cuando mi primo me dijo que estaba enamorado de mi desde que era un chiquillo, eso me hizo sentir fatal, le dije que eso no podía ser.
Esto sucedió en verano del 2007 y desde entonces no hemos hecho nada más, él me insiste pero yo estoy un poco liada.
Un besazo desde España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario